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Rabjam Rinpoche, el abad del monasterio Shechen en Nepal, fue invitado de honor recientemente del Festival de Shey, que se celebra cada 12 años en la región del Dolpo, en el noroeste de Nepal.
Solo dos docenas de personas viven todo el año en este valle tranquilo. Este año, sin embargo, más de 4000 peregrinos viajaron para asistir al festival y recibir las bendiciones de Rabjam Rinpoche. Muchos de ellos viajaron durante 7 o 15 días a pie por pasajes de montaña y a través de valles, y luego acamparon en el valle durante una semana. El valle está verdaderamente ‟en el fin del mundo”, sin caminos, ni electricidad, ni teléfono.
Estas fotografías muestran la belleza salvaje de esta región remota de Nepal, y el entusiasmo de los peregrinos por la visita de Rabjam Rinpoche.